Un nuevo capítulo en la historia de la política chilena se vivió durante la jornada de este miércoles, luego de que el escritor Patricio Fernández presentara la renuncia voluntaria a su cargo como coordinador de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado, que se produjo el 11 de septiembre de 1973.
A través de una carta, el periodista chileno se dirigió al mandatario nacional, Gabriel Boric, para comunicarle su decisión; misma que se produce tras la arremetida encausada por el Partido Comunista (PC) y otros actores sociales, motivados por las declaraciones del ex convencional en el programa ‘Tras las líneas’, que transmite Radio Universidad de Chile.
Es importante recordar que el escritor está en el centro de la polémica desde el pasado 13 de junio. Varios diputados del oficialismo y 160 organizaciones de derechos humanos lo acusaron de relativizar el golpe de Estado, exigiendo la dimisión y el cese de sus funciones con motivo del cumplimiento de medio siglo de este acontecimiento histórico.
A juicio de quienes no están de acuerdo con la participación de Fernández en los actos de conmemoración, decir que “la historia podrá seguir discutiendo por qué sucedió o cuáles fueron las razones o motivaciones para el Golpe de Estado” lo convierte en una persona no apta para liderar una fecha tan relevante para el acontecer nacional.
De igual forma consideran que el analista político “no condena el golpe de Estado, restándole valor y desconociendo la relación de causa y efecto entre el golpe de Estado y las violaciones a los derechos humanos, las que solo son explicables por el golpe militar” que terminó con el derrocamiento del Gobierno del presidente Salvador Allende.
En este sentido, desde La Moneda han hecho oficial la renuncia del ex convencional, emitiendo un comunicado en el que agradecen su espíritu democrático y entienden las razones que lo llevaron a tomar tal decisión.
“La Dirección de Comunicaciones y Prensa de la Presidencia de la República informa que el asesor presidencial Patricio Fernández ha presentado su renuncia voluntaria a las funciones desempeñadas en el marco de la conmemoración de los 50 años del 11 de septiembre de 1973 (…) Se valora su espíritu democrático, su compromiso con los derechos humanos y se agradece públicamente el rol que jugó en la organización y en la construcción del mensaje central de esta conmemoración, el que se resume en las palabras DEMOCRACIA, MEMORIA Y FUTURO”, reza el texto.
Por su parte, Fernández, quien no seguirá liderando la conmemoración de la rebelión, indicó que es consciente de que su persona se ha convertido en “un escollo”, motivo por el cual no seguirá al frente. Asimismo, aprovechó la oportunidad para expreesar su gratitud con el poder Ejecutivo, manifestando estar agradecido por la oportunidad y enfatizando que seguirá aportando a la construcción de la sociedad desde sus trincheras.
“Quisiera agradecerle la confianza puesta en mí para ayudarlo a construir el marco conceptual y el tono con que su gobierno espera que se conmemoren estos cincuenta años del golpe de Estado (…) Soy un escritor y periodista que aceptó esta tarea orgulloso de poder aportar a hacer de tan importante conmemoración un momento de diálogo, de intercambio, de aprendizaje conjunto y de compromiso amplio con el cuidado y defensa de la democracia y los derechos humanos. A pesar de esta decisión, seguiré colaborando desde la escritura, la reflexión y todo espacio en que uno sea requerido para que esos objetivos que en conjunto nos propusimos puedan cumplirse o al menos avanzar significativamente”, sostuvo.
Texto íntegro de la carta enviada por Patricio Fernández al presidente Gabriel Boric:
“Quisiera agradecerle la confianza puesta en mí para ayudarlo a construir el marco conceptual y el tono con que su gobierno espera que se conmemoren estos cincuenta años del golpe de Estado. Los pilares sobre los cuales acordamos que se invitaría a todos los chilenos a formar parte de este importante momento fueron tres conceptos fundamentales e indispensables hoy en la discusión pública: Memoria, Democracia y Futuro.
Tenemos un pasado que recorrer, plagado de errores y horrores, pero también de grandes logros y gestos admirables. Al cabo de medio siglo de uno de los acontecimientos más violentos y dolorosos de nuestra historia, parece ser un buen momento para reflexionar como comunidad justamente sobre aquello que nos enorgullece y aquello que no quisiéramos repetir jamás.
Los chilenos sabemos bien los enormes costos que significó para muchísimos compatriotas el quiebre de la democracia: violaciones sistemáticas de los derechos humanos, asesinatos, desapariciones, torturas, exilio, censura, desencuentro, intolerancia. Y hoy, cuando la democracia vuelve a ser cuestionada en muchos lugares del mundo y desvalorizada incluso entre muchos de nosotros, es ésta una buena ocasión para reafirmar (en recuerdo y como homenaje a todos quienes murieron y sufrieron, y también como la más valiosa herencia que podemos regalar a nuestros hijos) el compromiso de ojalá toda la comunidad política con ella. No es posible este compromiso con el futuro sin memoria. Sería como construir una casa en el aire.
Presidente: mi persona se ha vuelto un escollo para el buen desarrollo de esta conmemoración y el reto es tan grande e importante que quisiera pedirle entender mi decisión indeclinable de hacerme a un lado. Soy un escritor y periodista que aceptó esta tarea orgulloso de poder aportar a hacer de tan importante conmemoración un momento de diálogo, de intercambio, de aprendizaje conjunto y de compromiso amplio con el cuidado y defensa de la democracia y los derechos humanos. A pesar de esta decisión, seguiré colaborando desde la escritura, la reflexión y todo espacio en que uno sea requerido para que esos objetivos que en conjunto nos propusimos puedan cumplirse o al menos avanzar significativamente.
El desafío es grande, hay deudas por saldar, dolores que comprender, rencores e intolerancias que vencer. Han sido los cincuenta años más rápidos de la historia humana y habitamos un mundo confuso y repleto de transformaciones en curso por delante. No es fácil, pero quiero creer que, a pesar de las dificultades, los chilenos optaremos muy mayoritariamente por encarar lo que se nos viene en paz, con curiosidad por los distintos e interés por aprender de aquellos que han tenido vidas y experiencias distintas de las propias“.
Es menester acotar que entre las figuras políticas que repudiaron las declaraciones de Fernández se encuentra el alcalde Recoleta, Daniel Jadue. La primera autoridad municipal no titubeó en mostrar su desacuerdo, señalando en su cuenta de Twitter que “una persona que relativiza el golpe militar no puede coordinar la conmemoración de los 50 años”.
Adhiero plenamente a la declaración de la agrupación de familiares de Ejecutados Políticos ante las cuestionables palabras de Patricio Fernández. Una persona que relativiza el golpe militar no puede coordinar la conmemoración de los 50 años! https://t.co/saIWF5XddC
— Daniel Jadue (@danieljadue) July 1, 2023
En la misma línea, la diputada Carmen Hertz enfatizó que la persona que esté al frente de la conmemoración debe condenar el golpe de Estado como un crimen de lesa humanidad, con trayectoria en el compromiso y la defensa de los derechos humanos.
“Cualquier tipo de negacionismo no es aceptable. No queremos peros, ambigüedades, retractaciones posteriores para calificar el Golpe de Estado como un crimen, como el crimen fundacional del terrorismo de Estado en que la dictadura hundió este país por 17 años”, en entrevista con BiobioChile.
Bancada UDI suspende su participación en eventos conmemorativos
Tras darse a conocer la renuncia de Patricio Fernández, diferentes partidos políticos se pronunciaron al respecto. Uno de ellos fue el Partido de Unión Democrática Independiente (UDI), indicando que no participarán en las actividades de conmemoración de los 50 años por considerar que “una vez más el presidente Gabriel Boric ha cedido a las indecentes presiones ejercidas por el PC”.
De acuerdo con la bancada de diputados, el Partido Comunista “en su afán de imponer una única verdad sobre los hechos acontecidos en aquella época, ha recurrido nuevamente a la cultura de la cancelación“. Por esta razón, han decidido no asistir a las actividades inherentes al aniversario del golpe de Estado.
“El PC ha intentado arrogarse el derecho de ser quienes definan el relato oficial que se establecerá en conmemoración de los 50 años del 11 de septiembre de 1973. Con la salida forzada de Fernández, el único que queda en una posición de cuestionamiento es el presidente Boric y su gobierno”, según reseña CNN Chile.