La joven pareja grabó la escena y la difundió en internet. En Irán está prohibido el baile en público y las mujeres solo pueden hacerlo frente a hombres si estos son familiares, sin incluir el prometido, como es el caso.
Y aún menos sin el hiyab, tal como aparecía la mujer en la grabación.
La acción fue interpretada como un gesto de apoyo a las manifestaciones que se extendían por todo el país al grito de “mujer, vida y libertad”.
Según el veredicto del Tribunal Revolucionario de Teherán, cada uno de ellos recibió una pena de diez años y seis meses de prisión por “fomento de la impureza y la indecencia, montaje y colusión contra la seguridad nacional y propaganda contra el régimen”.
Ninguno dispuso de un abogado, a pesar de que supone un derecho, y vieron rechazada su petición de libertad bajo fianza.