Por unos segundos los fanáticos del poeta francés, Arthur Rimbaud, creyeron estar viendo un hito fotográfico de aquellos grandes, inolvidables. Pero, con el paso de los minutos, la duda inquietaba y mucho más ahora, que este tipo de “descubrimientos” requieren dosis altas de ojo crítico y sospecha.
La foto en cuestión mostraba, supuestamente, la imagen de un Arthur Rimbaud en sepia, con las manos en los bolsillos de su abrigo, mirando fijamente a la cámara. Sobre su rostro, jovial y conocido en el mundo entero, su pelo levemente desordenado se inclinaba a su derecha. Detrás de él una calle inclinada, unos paraguas, Rimbaud como peatón. Un cuadro demasiado perfecto, e inédito, para ser verdad.

La imagen, que calza con la estética y el mito de Rimbaud, no es otra cosa más que una ilusión de la inteligencia artificial. Según Infobae, la fotografía es producto del artista Luc Loiseaux que la compartió en un grupo de Facebook. La publicación estaba acompañada con el mensaje “así podría haberse desarrollado ese triste 1 de noviembre de 1873 si Rimbaud se hubiera cruzado en el camino de Ernest Balthazar”. No hubo sospechas entre los usuarios, solo sumisión.
Tiempo después, el propio artista debió salir a aclarar todo. La fotografía era falsa y trataba de emular a Rimbaud en noviembre de 1873, cuando nadie daba un peso por él y su obra, “Una temporada en el infierno“, hoy famosa en todo el mundo.

El impacto fue tal que escritores como Martín Caparrós tuitearon mensajes como “el futurito: aparece una ‘foto nueva’ de Rimbaud y la mayoría sospecha que es una falsificacion AI. Así van a ser nuestras vidas de ahora en más: la mirada crítica -o la mirada paranoica. En todo caso, otra mirada”.