En caída libre terminó la inflación el año 2023, indicador asociado al alza de precios que en diciembre anotó una variación mensual de -0,5% y cerró el año con un 3,9%, muy distante del 12,8% acumulado que anotó en 2022 y del peak inflacionario del 14,08% que alcanzó en agosto de ese año, el mayor registrado en las últimas tres décadas.
Esta contención del crecimiento en el costo de la vida, fue apuntada como un indicador clave en la buena evaluación de la economía chilena durante el 2023 realizada por The Economist, publicación que ubicó al país como el séptimo de mejor desempeño entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Crecimiento, empleo y mercado bursátil fueron los otros indicadores macroeconómicos ponderados para analizar el desempeño de los 35 países que integran la OCDE, que observó un alza del Producto Interno Bruto (PIB) y de los mercados bursátiles, la estabilidad del mercado laboral y una inflación a la baja.
Grecia, Corea del Sur, Estados Unidos, Israel, Luxemburgo, Canadá, Chile, Portugal, España y Polonia fueron los 10 países mejor evaluados por The Economist. En relación a nuestro país, el semanario destacó, en particular, que “los bancos centrales de países como Chile y Corea del Sur subieron la tasa de interés de forma agresiva en 2022, antes que muchos de sus pares de países de altos ingresos y ahora parecen estar cosechando los beneficios”.
En base a estos mismos indicadores, Manuel Agosin, Gabriela Clivio, Roberto Álvarez y Lorena Flores, académicos de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile, entregan sus observaciones sobre estos y otros aspectos que serían incidentes en el desempeño económico del país este año.
Crecimiento
Manuel Agosín, Ph.D. en Economía de la Universidad de Columbia y plantea en general que “el año en curso será mejor que el que acaba de terminar. La economía tocó fondo, habrá algo más de empleo y la inflación continuará en descenso hacia el rango meta del Banco Central. Sin embargo, habrá poco que celebrar. La recuperación será más débil que en el pasado y la tasa de desempleo continuará exasperantemente más elevada que en recuperaciones pasadas”.
Sobre las perspectivas de crecimiento, afirma que las proyecciones son menos positivas. “La inversión privada, clave para el crecimiento, seguirá bajo un manto de incertidumbre, en buena medida por el entorno desfavorable que debe enfrentar, producto de la animadversión soterrada de las autoridades gubernamentales hacia la empresa privada”, sostiene el académico.
Gabriela Clivio, directora académica del Programa Intensivo en Fundamentos Financieros para Directivos del Centro de Alta Gerencia de la FEN, apunta que “si bien durante el año 2023 el crecimiento fue 0%, en el año 2024 la economía debiera crecer entre 1,25% y 2,25%”. En línea con estas proyecciones, señala que “el principal desafío para el país durante el año 2024 seguirá siendo retomar la senda de crecimiento en una economía que se encuentra estancada en un contexto en el cual la demanda externa se encuentra débil”.
Roberto Álvarez, Ph.D. en Management de la Universidad de California, destaca como una señal muy positiva que se vuelva a hablar de crecimiento “para alimentar las expectativas respecto a una tasa de crecimiento más alta de las que hemos experimentado en los últimos años”.
No obstante, advierte que existen desafíos fundamentales en torno a inversión y productividad. “Si no somos capaces de mejorar en esas dimensiones en más de un 2 o 3%, es bien difícil que la economía crezca a tasas superiores“.
Inflación
En relación al costo de la vida, Clivio enfatiza que durante el 2023 “se avanzó de manera muy importante en la resolución de los equilibrios macroeconómicos que se acumularon en los últimos años”. Respecto a este año, en tanto, indica que “en la actualidad, el Banco Central, que ya redujo la TPM 300 puntos base, me parece que debiera acelerar el ritmo de los recortes de la tasa de política monetaria, dado que esta se encuentra hoy en día en niveles contractivos, mientras que la economía no crece”.
Agosin, por su parte, subraya que “el Banco Central es nuestra institución más sólida y la confianza que tenemos en ella se verá confirmada por su éxito en dominar una inflación qu, ya estaba en dos dígitos desde comienzos de 2022. En diciembre pasado ya había cerrado en 3,9% (diciembre 2022-diciembre 2023), lo que indica que la inflación está convergiendo hacia la meta del Banco (2-4%) en forma más rápida que lo anticipado”.
El profesor Álvarez, en tanto, complementa que “la inflación bajó más de lo que se había considerado a principio de año y eso, obviamente, es un logro bien importante y algo que hace que Chile aparezca con un buen desempeño relativo a otras economías. Va a ser difícil repetir eso porque la inflación ya está cerca del 3%, que es el número alrededor del cual se establece la meta de inflación por el Banco Central”.
Mercado laboral
Lorena Flores, directora ejecutiva del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, afirma que es posible ser optimistas para este año. “El mercado del trabajo durante el 2023 se mostró resiliente. Si bien fue el primer año sin cuarentenas, se observaron inflaciones elevadas y estancamiento económico en muchos países y Chile no fue la excepción. Por ello, se esperaba un mayor impacto en el empleo, sin embargo, la mayoría de los empleos perdidos durante la pandemia se han ido recuperando. Ciertamente aún nos queda tarea pendiente, pero es posible seguir avanzando, ya que gracias a los datos de la encuesta de empleo podemos ver que quiénes aún no han recuperado sus niveles de empleo son los jóvenes y los mayores de 55 años”, detalla.
Para el 2024, añade, “se pueden focalizar las políticas de empleo hacía estos dos grupos. En los mayores de 55, la reconversión puede jugar un rol importante, para lo cual la capacitación es fundamental. Además, en ambos grupos se pueden implementar medidas como el IFE laboral. Si el Gobierno pone los énfasis ahí, es posible mejorar”.
El profesor Álvarez sostiene que es probable que el mercado laboral pueda registrar “algo de crecimiento en los sectores exportadores, que ya se están recuperando bastante de los efectos negativos de la pandemia, pero -en general- el empleo agregado no debería presentar cambios importantes respecto de lo que se está viendo hoy”.